Una caliza muy especial
En detalle, la caliza griotte es muy irregular y carece de superficies lisas, por lo que se dice que es muy “nodulosa”. Posee numerosas estructuras blanquecinas, que no son más que fragmentos de caparazones de los organismos que vivieron en los sedimentos que acabaron por originarla. La caliza griotte fue muy utilizada en la arquitectura tradicional de la montaña leonesa, dada su belleza, la abundancia de buenos afloramientos y la facilidad de su labrado.
