Un lugar óptimo para entender la geología
La cordillera Cantábrica esconde en sus rocas una compleja historia que se remonta varios cientos de millones de años atrás, desde los albores del Paleozoico. Sus rocas, de enorme diversidad, albergan una valiosísima información sobre los materiales que las constituyen, los procesos que las generaron y los organismos que vivieron mientras estos tenían lugar. Los geólogos llevan muchas décadas intentando recopilar e interpretar toda esa información, con el fin de comprender los distintos factores o sucesos que constituyen la dilatada historia de la Tierra; sin embargo, es una tarea sumamente complicada, ya que las distintas “páginas” que la componen aparecen dispersas a lo largo del planeta y acceder a ellas suele resultar muy complicado. Sin embargo, existen lugares como Los Barrios de Luna, donde gran parte de esta información resulta muy accesible, lo que ha brindado la posibilidad de avanzar considerablemente en el conocimiento del origen de la cordillera Cantábrica.
