Una vez dejado atrás el cabalgamiento, tras avanzar unos pocos metros, vuelven a aparecer las dolomías de color ocre o “camello” características de la Formación Láncara. Como ocurría en su primer afloramiento, los primeros metros están constituidos por oolitos. Pero en este segundo afloramiento es posible observar otras estructuras que, si bien también están presentes en el primero, resultan más fáciles de identificar aquí. Para detectarlas, es preciso avanzar por la carretera hasta aproximarse a una curva bastante pronunciada.