Estructura de los trilobites
Los trilobites poseían un caparazón externo con tres regiones bien definidas: la cabeza o “céfalon”, el tórax, y la cola o “pigidio”. Cada una de estas tres regiones estaba recorrida por dos surcos longitudinales que delimitaban tres lóbulos, uno central y dos laterales. Es la existencia de estos tres lóbulos, a lo que este grupo debe su nombre: trilobites, tres lóbulos. Como todos los artrópodos, los trilobites necesitaban mudar, es decir, librarse de su caparazón a medida que crecían para después generar uno nuevo. Los caparazones viejos eran abandonados y también podían fosilizar, por lo que la mayor parte de los fósiles de este yacimiento corresponden a restos de muda y no a cadáveres.
